Clases particulares

Las clases individuales que doy son de piano, audioperceptiva, armonía y contrapunto, composición y arreglos, improvisación en piano, computación aplicada a la música y arte multimedia. En estas clases se puede profundizar detenidamente en las necesidades y características del alumno, siguiendo más específicamente su camino personal.

Si bien el estudiante elige la materia que desea estudiar, en el estudio de la música sucede como en su práctica profesional, o sea uno en realidad está desarrollando todos los aspectos del arte musical cuando ejecuta un instrumento; inclusive como herramientas didácticas empleo materias como la improvisación, la composición, el canto, etc., para alumnos de piano o armonía. Este procedimiento no es nuevo, pero muchas veces no está lo suficientemente explotado por el docente.

En mis clases lo que verdaderamente me interesa es desarrollar en el alumno la personalidad del músico, que incorpore ese aspecto de la actividad artística que está antes, durante y después de la ejecución del instrumento. Escuché mucho decir: "Lo primero que un docente de música tiene que enseñar es a hacerse músico, a ser músico, luego a tocar un instrumento". Si bien soy músico profesional desde hace muchos años, me resulta difícil definir qué es ser músico, además de la "obviedad" de trabajar de músico y vivir de la profesión. No sé si es posible que alguien sea músico. Pero sé que hay una actitud, una postura, una forma de encarar la actividad propia de un artista y otra que no lo es. Un artista puede ser una gran estrella, otro puede desarrollar una modesta y anónima labor, pero si tiene esta actitud de músico nunca va a ser un mediocre, nunca va a perder el rumbo del sentido.

Volviendo a la frase citada, tampoco creo que sea posible aprender esto en abstracto: se aprende a ser músico estudiando música y tocando un instrumento. Pero para eso desde el primer momento el aprendizaje debe superar el necesario estudio de la técnica instrumental, de tal manera que a través de ella se persiga siempre una realización artística y personal, un sentido, una experiencia. Por eso no pongo atención a la obtención de un producto, ni de lo que comúnmente llamamos éxito. Éste viene solo, no sabemos cuándo, no sabemos de dónde, si el trabajo sigue un camino que no se aparte del sentido que para el estudiante tiene su actividad artística.

Bueno, creo que fui claro, esta es la manera en la que me interesa trabajar como docente. Cada alumno tiene primero un reunión de evaluación en la que nos ponemos de acuerdo en las modalidades y los objetivos. Las clases individuales son de una hora semanal, se abona el mes por adelantado. Si el día acordado en un mes es feriado entonces no hay clase. Si un mes tiene cinco clases no se cobra una clase de más. Las ausencias sin aviso no se recuperan, sí las previamente acordadas con suficiente anticipación, pero dentro de un plazo razonable. Si por alguna razón no puedo dar una clase y no podemos encontrar con el alumno un horario alternativo, al mes siguiente se le descuenta el 25% de la cuota. Los interesados me pueden escribir a anibalzorrilla@yahoo.com.ar.